Mucho tiempo ha pasado, por diversos motivos... bueno la verdad es porque no me ha dado la gana, desde la última vez que escribí un post.
Las visitas a la web no han parado de subir desde que dejé de escribir ¿Acaso me premiáis por ello? Quizá debería sin más cruzarme de brazos y esperar a que reventara el servidor.
El cese de los ingresos de google adsense también ha influido. Tener que escribir gratis para cuatro palurdos como vosotros es agotador.

Pero en fin, mientras tanto, la web ha cumplido un año, y todos somos más mayores, más felices y más ricos, o al menos más mayores.
Tenía pensado hacer un refrito con "lo mejor de sacapuntas" para arrancar esta nueva temporada veraniega, pero sería demasiado castigo para mis queridos pal... lectores.
Pero no os desaniméis, ya se que vuestras vidas carecen de sentido si no podéis disfrutar de vez en cuando de mis maravillosos escritos, y que leerme es lo más cerca que podéis estar del genio creador. (Eso o ver a Jose Luis Moreno)
Quizá debería empezar por algo fácil y que guste a todo el mundo, como un artículo sobre televisión. ¿Qué tal "Supervivientes"?

La verdad es que no lo veo asiduamente porque es una mierda demasiado grande incluso para mí, coprófago profesional.
Solo sé que Marlene Mourreau enseñó dos o más tetas el primer día, como adelanto para lo que podría venir después.
Sin embargo, y como pasa con la mayoría de los inicios, se quedan en "traillers" efectistas para acaparar la audiencia de los 4 o 5 (decenas de millones) de españoles que se masturban con la simple visión de un pecho silicónico (cónico y de silicona). Al final todo quedó en dos tetas, y nadie folla ni se masturba mirando al mar, o al menos no nos lo enseñan. Tampoco han hecho hasta ahora peleas a vida o muerte, ni han despedazado a Pipi para cocinarlo (únicas cosas que podrían haber salvado el show). Por contra nos han mostrado un forúnculo del susodicho, culo en pompa sufriendo como una parturienta. Nos han enseñado a una Carmen Russo completamente desequilibrada, que se pasa el día sola en una playa hablando con un coco, y a un pibe cuya transformación de modelo a esqueleto humano es realmente preocupante.
Ellas sin embargo siguen tan lozanas como siempre, como si la reserva de grasa que guardan en sus gibas fuese suficiente para mantenerlas activas a todas horas.
Luego están los contertulios, que no pueden faltar claro, en los debates nocturnos, con un Alessandro Lecquio con gesto serio, hablando sobre los mecheros y los cocos de Carmen Russo como si fuese un analista económico, y al retrasado de Víctor Sandoval, completamente histriónico y desatado con las venas de su cuello a punto de reventar (estilo María Putiño) por cualquier memez.
En fin, no me gusta criticar lo que no veo, y por tanto no puedo tener opinión, pero opino que es una MIERDA ENORME.

Gracias.