Llueve llueve llueve desde mi ventana.Negros nubarrones que invaden mi alma, Y yo quiero gritar gritar gritar ahhhh.

Las gotas son como insistentes punzadas en mi mente, que me recuerdan mis propias desgracia, como notas de una música que nunca oyó nadie. Como canciones de Juanes.

Hoy me ha salido un grano, enorme, la vida es como un grano: hay que exprimirla para sacar toda la pus posible.

Como soy una fracasada que me escondo tras un texto pretendidamente lírico pero que en definitiva cae en lo ridículamente pretencioso, me aburría, así que me acerqué de nuevo a la farmacia.

El test de embarazo ha vuelto a dar negativo. Es el cuarto que me hago esta semana, y estoy comenzando a pensar que no estoy realmente embarazada. Quizá, una parte de mi ser lo desea, lo quiere; como le ocurrió a mi perra cuando tuvo aquel embarazo psicológico.

A lo mejor es un deseo oculto de que las tetas se me hinchen, y así no insista más a papá sobre la operación de cirugía estética.

Otra posibilidad es que inconscientemente quiera atar a Luismi a mi vida... es el padre del bebé que llevo dentro, me amó una sola vez en la feria del pueblo y desde entonces no pasa un solo día sin que le llame. Luismi es tan guapo, tan mayor... últimamente no tiene saldo o se queda sin batería con frecuencia, porque nunca coge el móvil.

Cuando salgo a la calle veo amor, cuando saludo a la gente veo amor, amor en las farolas, amor en los campos, amor amor amor amor y yo quiero que todo ese amor me penetre hasta atrás...

Sin embargo, no puedo decir nada de mi relación con él porque su padre es un hombre muy poderoso, que se relaciona con las altas esferas políticas del país. De hecho no debería decir nada pero os lo comentaré a vosotros, mis lectores que habéis acudido a este confortable rincón íntimo de mi alma llamada 'weblog'. Su padre es nada más y nada menos que el alcalde de Villafría, un señor muy recto, muy serio y muy facha. Se dice que podría incluso ser el próximo Delegado de Gobierno por Villafría en el próximo congreso del PP. Como imagináis tiene muchos contactos y mucha influencia, y no creo que viera con buenos ojos mi relación con su hijo.

Luismi es maravilloso, se para delante de las niñas con su Golf nuevo y la ventanilla bajada, con Bisbal a tope. Se baja del coche con su camisa siempre muy bien planchada, su pelo engominado, oliendo a colonia cara y se apoya en el coche para que las niñas le vean. Aún no sé cómo voy a decirle que llevo dentro un hijo suyo.

Hoy hay un eclipse de sol. Le he dedicado una poesía, ya que el eclipse en sí es como mi vida.

Los últimos versos me los ha prestado Bonnie Tyler. Me he emocionado escribiendo y las lágrimas no me dejan ver bien la pantalla, intentaré reponerme por el bien de mi feto, y miraré directamente al sol, si la lluvia me deja.
Besitos, os quiero.